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* El timonel argentino pidió que le hablen de “récords” y no de títulos.
* Rememoró su paso como DT de Ángeles de Puebla donde solo usó mexicanos.
El técnico argentino Ricardo La Volpe se metió a la Liguilla del Apertura 2015 y será la primera que dispute después de siete años de ausencia, mismos que para el exentrenador de la Selección Mexicana no representa algo relevante e incluso señaló que ese tipo de datos son inexistentes cuando ha realizado récords y hazañas.
“Estuve en Costa Rica, fuera del país, en Banfield… son las cosas que nunca entiendo. Es como el récord de los cuatro años que estuve con la Selección porque para mí son récords, el pasado para mí hay que dejarlo atrás, vamos a mirar el presente, estamos buscando un campeonato que es difícil. El pasado lo dejó atrás, pero siempre tiran piedritas y yo tiro bombas; ahí están los récords”, expresó La Volpe en charla vía telefónica.
Fue en el Apertura 2008 cuando La Volpe accedió a su última Liguilla con el Monterrey, equipo con el que llegó hasta Semifinales para luego probar suerte con la Selección de Costa Rica, aunque en ese tiempo también dirigió al Atlas, al Atlante y a Chivas sin conseguir grandes cosas.
“Cuando hablan de campeonatos me gustaría que hablen de lo que ya dije.
“Hay técnicos que tienen siete, ocho o nueve títulos, pero solo uno había jugado con 11 mexicanos y eso es lo bueno, al margen de Chivas que juega con puros nacionales. El Ángeles de Puebla fue así cuando lo dirigí y nadie lo dice, cuando me rompan récords seguimos hablando, y con puros mexicanos habiendo descenso tengo un récord y cuando los rompan hablamos de otra cosa”, dijo.
Fue en la Temporada 83-84 cuando La Volpe pasó de jugador a Director Técnico con el Ángeles de Puebla que había tomado ese nombre unos meses antes cuando se compró la franquicia del Oaxtepec y solo Alberto Jorge Esposito, argentino, era el único extranjero.
“Cuando veo que componen equipos con 12 o 14 naturalizados pienso y veo que lo mío fue una hazaña, lo mío fue increíble; entonces se lo diré a mis nietos a ver si me creen. Como me atacan me gusta sobrarme”.
