Los números de aceptación que los habitantes de Estados Unidos tienen del nuevo Presidente de ese país son los peores en la historia de ese territorio. Ni cuando el Presidente Nixon empezaba su segundo mandato y el juicio de Watergate empezaba a sonar tenía tan baja aceptación.
La aprobación del Trompetas es ya del 38%, un número muy bajo para tener tan poco en dicho puesto. Es decir, solamente treinta y ocho personas de cada cien aceptan que el Presidente está haciendo bien las cosas, pero el resto definitivamente cree que es el peor Presidente de la Historia.
Y normalmente es así, cuando un Presidente está en funciones nunca obtiene una aceptación alta, siempre rondan los 60%´s, cosa que ya es de por si muy buena, pero en México los presidentes siempre andan entre 30 y 50 por ciento, algo muy bajo para los estándares del país vecino, lo que pasa es que nosotros por naturaleza no queremos a nuestra autoridades, por que ellos se lo han ganado.
En fin, resulta que después de que Donald Trump decidió despedir a Comey, el director del FBI, porque supuestamente no le rindió lealtad y porque se estaba acercando a la verdad sobre la ayuda que Rusia le brindó para poder ganar las elecciones, le ha llovido en mojado, ha recibido todo tipo de críticas.
Algo que ayer me dí cuenta, es que en los programas de entrevistas y humor que se transmiten en la noche en las principales cadenas de televisión de ese país, de tonto no bajan al Presidente y lo insultan de manera indirecta, todas las noches y en casi todos los canales y la gente les aplaude.
Hay rumores de ciertos sectores de las cámaras de representantes de Estados Unidos, que describen que ya hay reuniones en ciertos círculos para empezar a redactar la ruta para despedir a Donald Trump de la Presidencia.
Pobre, pero el se lo ha ganado, es igual que el descontento que tienen los habitantes de nuestro país por los políticos, ya nadie cree en ellos.