Una reaparición (Carlota), campanas de boda (Pierre y su novia noble), una princesa en deportivas (Carolina), una princesa triste y dos Grimaldis ausentes. La temporada de fiestas en el principado de Mónaco quedó inaugurada este fin de semana con el Baile de la Rosa. Si el año pasado supuso la presentación oficial de Gad Elmaleh, pareja de Carlota Casiraghi, el baile de este sábado suponía el regreso de Carlota tras ser madre.