El poker es una de las actividades relacionadas con los juegos de casino más populares del momento, ya sea entre amigos o mediante el campo online. Una de sus características es que presenta una amplitud de modalidades, algunas de ellas desconocidas por la mayoría de aficionados y que a continuación expondremos dando todos los detalles y cuál es el objetivo principal de cada una de ellas.
En plataformas online más destacadas podemos encontrar no solo una variante como en la mayoría de salones físicos de antaño, sino que cuentan con una amplia gama de juegos de poker con dinero real como las tres cartas o la popular Texas Hold’em. Aparte de la multitud de opciones que se presentan, también permiten compartir mesa en tiempo real con otros usuarios sin importar la ubicación de estos y contar con un crupier real que repartirá en directo cartas al otro lado de la pantalla.
Las dos más populares
Como hemos comentado en el párrafo anterior, seguramente la modalidad más practicada en la actualidad es la Texas Hold’em, una variante del juego con una amplia historia que se remonta a principios del siglo pasado y que nació en la ciudad de Robstown, Texas, y que rápidamente fue adquiriendo popularidad y extendiéndose hasta ser uno de los más populares hoy en día. En ella, cada jugador cuenta con dos cartas de uso exclusivo y se deben hacer combinaciones de cinco usando, aparte del par que se tiene en la mano, las cinco que se destapan en el tapete y que también son de uso para los otros participantes de la partida. Las apuestas se van realizando en cada turno y la jugada más buscada, que garantiza la victoria, es la escalera real de un mismo palo.
Otra de las variantes populares es Omaha, que responde al nombre de una ciudad en Nebraska y que presenta algunas particularidades. En este caso se reparten cuatro cartas tapadas a cada uno de los jugadores. Estos están obligados a usar dos de las cuatro cartas exclusivas de las que disponen y tres de las cinco comunes que están en el centro de la mesa. Así pues, se dan muchas más posibilidades de conseguir una buena combinación ganadora.
Variantes más particulares
Aparte de las dos comentadas anteriormente, están disponibles otras variantes más curiosas e innovadoras que también tienen su atractivo. Una de ellas es el 5 Card Stud. Aquí el jugador recibe dos cartas iniciales, una tapada y la otra descubierta. Una vez hechas las apuestas, recibe del crupier otra descubierta hasta que encima la mesa hay cinco cartas, una tapada y cuatro visibles. Al final se destapan todas y quien tenga mejor combinación, gana. En caso de empate, consigue la victoria aquel que tenga mejor palo por este orden: picas, corazones, rombos y tréboles.
Muy parecida a la variante de cinco cartas, y con mucha presencia en el campo virtual, se presenta 7 Card Stud. En este caso son tres las cartas iniciales que se entregan: dos tapadas y una visible. En total, cada jugador debe terminar la partida con siete cartas, tres de ellas cubiertas y cuatro descubiertas. El reparto se hace en cinco turnos y, en cada uno de ellos, se pueden realizar apuestas. El sistema de desempate es el mismo que el 5 Card Stud, premiando el palo de mayor valor.
Otra de las modalidades curiosas es la del poker caribeño, popular en algunos casinos. Su principal particularidad es que el jugador no compite con los otros integrantes de la mesa, sino que lo hace contra el propio crupier. Su funcionamiento es sencillo: se hace una apuesta inicial, se reciben cinco cartas sin posibilidad de descarte y se decide si seguir jugando o no. Se gana siempre que se tenga mejor mano que la banca. Otra curiosidad recae en los premios, en que, según como sean las manos jugadas por uno y por otro, el jugador se puede llevar hasta 100 veces la apuesta realizada según el tipo de casino del que estemos hablando.
