A partir del 1 de noviembre, todos los camiones medianos y pesados que atraviesen la frontera hacia Estados Unidos desde otros países, incluyendo México y Canadá, enfrentarán un impuesto del 25 por ciento, según un anuncio hecho por el presidente Donald Trump en su plataforma Truth Social.
“Desde el 1 de noviembre de 2025, todos los camiones medianos y pesados que entren a Estados Unidos desde el extranjero tendrán que pagar un impuesto del 25%”, publicó Trump esta mañana.
Esta elección es parte de un plan para salvaguardar a los fabricantes de Estados Unidos de la competencia global, especialmente a aquellos que fabrican vehículos de carga como Peterbilt, Kenworth o Freightliner.
Aunque este anuncio ha preocupado a las empresas mexicanas que envían vehículos a EE. UU. , no se ha aclarado si esta medida se ajustará a las normas del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), que permite el comercio libre de vehículos siempre que cumplan con ciertos criterios de contenido regional.
Si se implementa sin excepciones, el nuevo impuesto podría tener un gran efecto sobre los costos logísticos y comerciales, tanto para los fabricantes de camiones como para las compañías de transporte que operan entre las dos naciones, incluyendo a algunas que están en Michoacán.
La industria del transporte de carga en México envía miles de unidades al mercado estadounidense cada año. Según información de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), más del 90% de las exportaciones se dirigen a Estados Unidos.
Hasta ahora, ni la Secretaría de Economía ni la Secretaría de Relaciones Exteriores de México han proporcionado un comentario oficial sobre esta nueva política comercial.
