Servicio que tiene que ser premiado y ni quien lo pueda negar, es que cuantitativamente nadie en Michoacán está contra Peña Nieto; en esta entidad a nuestro presidente no lo tocan ni con el pétalo de una rosa.
Todo lo que como antes se decía de Calderón, hoy lo recibe el comisionado Alberto Castillo, que la hace de malo perfectamente, es su misión. Por eso todos los legisladores que querían que compareciera el procurador y el titular de la Secretaría de Seguridad Pública se quedaron muy calientes.
Aunque hay casos que merecen ser considerados que por los que nos gobierna déspotamente.
Pero como no son iguales las reacciones de un veracruzano a un sonorense, que los servidores públicos que hoy tenemos, deben mediar su drasticidad y no cobrarse desacatos por venganza. (MSV)
En cambio, en el Estado de México, ya se dice que el comisionado está desarrollando una buena tarea en Michoacán, encargada por quien simpatiza para que sea el sucesor de Eruviel Avila.
La grilla es así y el valor agregado es que qué dieran los que llegan a mandos supremos por tener gente que les interprete al pie de la letra sus pretensivos, donde hay problemas tan profundos, como el que tenemos a la vista, que mientras no corten el dominio chino en la costa y se lo entreguen a los Estados Unidos, todos los personajes que envía a México Obama y que nos hacen duras recomendaciones, este país no despegará económicamente como lo había ofrecido con las reformas energéticas que logró Peña Nieto. (MSV)