Con recursos económicos concurrentes de los tres niveles de gobierno por el orden de los 486 mil 631 pesos, personal técnico especializado de la Comisión de Pesca del Estado (COMPESCA), inició labores de extracción y limpieza de vegetación acuática de la Presa Malpaís, ubicada en este municipio.
El proyecto tiene un horizonte de trabajo de 372 hectáreas, en beneficio de más de 40 familias de pescadores de manera directa y mil 200 productores agrícolas del valle Morelia- Queréndaro.
Actualmente el vaso de la presa se encuentra afectado en gran manera por la invasión de vegetación acuática (lirio, chúspata, carricillo), a pesar de que cada año se lleva a efecto la erradicación de vegetación acuática en la presa, la tasa reproductiva de los vegetales rebasa la capacidad del trabajo que se realiza. A la fecha el embalse se encuentra invadido en una superficie de 592.9 hectáreas.
El director general de la Compesca, José Raúl Gutiérrez Durán, ponderó los esfuerzos coordinados de la Secretaría de Desarrollo Rural (Sedru) a la cabeza de Jaime Rodríguez López; de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (Sagarpa), así como de la presidencia municipal de Queréndaro y de la empresa Fertilirio, para conjuntar esfuerzos, bajar recursos y emprender esta actividad, que deberá concluirse en el mes de diciembre.
El objetivo específico y principal del programa de limpieza de vegetación acuática es lograr la recuperación de las condiciones hídricas, ecológicas y ambientales para favorecer el aprovechamiento de los recursos naturales y pesqueros, explicó.
Se trabajará para propiciar la actividad biológica existente en el sistema acuático, lo que despejará de maleza el área para permitir una penetración de los rayos solares a la columna de agua, reducir la pérdida por evapotranspiración y evitar así la pérdida de artes de pesca, causadas por el lirio desplazado del viento, además de mantener una mayor calidad de agua para riego.
Gutiérrez Durán hizo notar que se pretende proporcionar un mejor nivel de vida de los habitantes de la región, mediante la pesca, artesanía y turismo, tras ampliar las superficies de captura y navegación de las embarcaciones, y crear un escenario conveniente para el esparcimiento.
Recordó, que la construcción de la presa Malpaís se inició en febrero de 1936, y es el sitio donde confluyen los ríos Queréndaro y Zinapécuaro.
Con 800 hectáreas de superficie y 18 kilómetros de longitud de su bordo, dicha presa constituye el cuerpo de agua más importante del Valle de Morelia- Queréndaro, tan solo por el hecho de tener una longitud de 6 kilómetros de norte a sur y 5 kilómetros de este a oeste, con una superficie compartida por el municipio de Zinapécuaro, que posee las dos terceras partes del cuerpo de agua, y el municipio de Queréndaro, posee la otra tercera parte.
Esta presa funciona como vaso regulador y de almacenamiento de hasta 100 millones de metros cúbicos de agua, y es el cuerpo que controla las avenidas pluviales de los ríos Queréndaro y Zinapécuaro.
Dijo que la vegetación acuática posee una función ecológica muy importante dentro de los lagos, lagunas y presas, ya que las zonas donde se encuentra, operan como barrera de fijación de los desechos orgánicos traídos por las escorrentías. Esto como resultado de los diferentes procesos de erosión tanto laminar como de cárcava, en las cuencas hidrológicas se presenta el proceso de acarreo y depósito de sedimentos, los cuales representan un tipo de contaminación natural.
Para frenar el proceso de deterioro así como la pérdida en la capacidad de volumen en lagos naturales, embalses, ríos y canales, la gestión y manejo de estos sistemas se ha optado por el empleo de las obras denominadas como dragado, mantenimiento y limpieza de malezas acuáticas flotantes, las cuales se realizan de manera periódica.
El director general de Compesca destacó que el presente proyecto tiene como objeto la extracción de vegetación acuática que ocasiona dificultad para la pesca comercial, obstrucción en los canales de navegación, falta de circulación de las aguas dentro del embalse de Malpaís, pérdida de volumen hídrico por evapotranspiración, siendo ésta proporcional a la medida del incremento de superficies de maleza, incremento en la retención de sólidos generando zonas pantanosas y posteriormente tierra firme, obstrucción de luz solar hacia la columna de agua y con ello la obstrucción en la liberación de oxígeno al agua, ocasionando una baja productividad acuática y la ausencia de organismos incluyendo a los peces.
Refirió que en los últimos años la degradación del suelo en la cuenca hidrológica cercana a la presa es evidente, ya que la erosión es más severa, densa y en dimensiones de cárcavas mayores, las cuales transportan los sedimentos sólidos a las zonas de inundación, zonas de riego (canales) y pequeñas obras de almacenamiento de agua.