Una médico forense que fue quién se desempeñaba como perito de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) y quién fuera despedida por presuntamente no pasar los exámenes de control y confianza arrancó con huelga de hambre esta mañana en las instalaciones de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH).
Graciela Delgado Luna, explicó que desde el 25 de octubre del 2011, interpuso una queja ante el órgano defensor de los derechos humanos, debido a que afirmó la trataron de forma indebida en el Centro de Control y Confianza, donde incluso le exigieron que se desnudará para practicarle el examen.
Sin embargo, acusó al órgano defensor de los derechos humanos de ser omiso, debido a que a lo largo de tres años, han hecho perdido en tres ocasiones las quejas que Delgado Luna a interpuesto y finalmente emitió una recomendación, la cual señala que la quejosa debe recibir atención psicológica de la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE).
“La doctora que me examina pues me dice que me baje la ropa interior y que le haga unas sentadillas y fue algo muy indignante y luego me volvieron a citar para volverme hacer el polígrafo y el examen duró 4 horas y me trataron muy mal, me acusaron de pertenecer a la delincuencia organizada, que sí vendía droga, que sí me había enriquecido, que sí había robado y secuestrado”, precisó.
La quejosa dijo que constantemente la CEDH archivó su queja, por lo que decidió acudir ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en búsqueda de la una solución que hasta el momento no le ha podido ofrecer el ombudsman michoacano, José María Cázares Solórzano, a quien acusó de servir únicamente a los intereses del gobierno Estatal y Federal.
Por lo anterior, la médico forense Graciela Delgado Luna arrancó en punto de las 08.30 horas de ayer, una huelga de hambre para exigir a los órganos defensores de los derechos humanos a intervenir para impedir que se continúen violentando los derechos de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y de la PGJE.
