Casi todos los más aguerridos del PRD, fueron convocados por Morón para trabajar por el poder municipal, pero la mayoría no le acompañó. Por eso el profesor también aguerrido, tuvo que reconocer que el triunfo se muestra ya muy difícil y ya con otro semblante, no con el que anunció haber invitado a la superioridad a que arrancara con él su lucha.
Bueno, con decirles que ni Juan Carlos Barragán se entusiasmó, que es al que menos le dan importancia en ese partido que ya agoniza.
Y aunque venga Navarrete a darle respiración de “boca a boca”, podrá darle vida extra a Morón.
Este líder que la creyó ganada por la unidad del SNTE con la CNTE, empezó a acusar un semblante diferente al ganado como líder de masas que sabe inyector ánimos hasta incendiarios.