Más cara una combi de servicio público, que una gasolinera

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La noticia de que por los movimientos que va a traer la reforma energética, resulta que el precio de una gasolinera es de 500 a 600 mil pesos, cuando aquí en Morelia el precio de la concesión de unas placas de combis gris, naranja y roja, valen más del millón y casi nadie vende porque dependiendo de la ruta, es lo que se saca de dinero. Oye comadre, entonces por qué a todos los que les dio concesiones los gobiernos como Cuauhtémoc a los periodistas, no lo defienden… Pues es la justificación del acierto del mismo hijo del que era el Tata, que no la Tuta, que les decía a los del PRD que necesitaban lo que les ofrecían, que les decía: ustedes acéptenlo que de todos modos esa es obligación de quien tiene que gastar lo que recoge como impuestos”. Y mira comadre, todos los gobiernos le dan concesiones a sus allegados y lo que pueden, pues si no lo hace el que sale, lo hará el que entra. Si pues, esto se vio con Arriaga Rivera que a muchos les dio los lotes de la Col. Chapultepec norte y sur y al último, en la parte superior de Palacio de Gobierno, puso una siete mesas a lo largo y sobre manteles extendió relojes y alhajas, para que cada uno de sus colaboradores, fuera agarrando algo como recuerdo de su desempeño con su gobierno. Oye comadre, que ya la Mamá Rosa otra vez anda en líos. Po’s como no, si ya quienes la respaldaban en los tiempos pasados ya murieron y ella quiere seguir haciéndola de toda una santa y buena mamá para menores que por las ayudas que recibe, les sigue dando la comida y la habitación. Comadre, pero la Mamá Rosa tiene de todo, desde críticas porque tiene jovencitos a “su servicio” y quienes la conocemos y la tratamos por un tiempo, es todo lo contrario, la prueba es que ahora, luego de todo lo que ha pasado, todavía en estos tiempos, llegan a temprana hora a su casa personas de todas las edades en busca de que les dé algo de alimentos y nadie ha dicho que presuma con ello, porque muchos a diario ahí almuerzan. Bueno comadre, lo interesante sería que alguien la emulara, que una senadora de la república hiciera lo mismo, no que se queja ese poder que al mes les están rebajando cien pesotes de su sueldo, cuando ganan 117 mil 600 y ahora ganan nada más 117 mil 500. Este sueldo no contempla lo que les dan de dietas, que es su sueldo, lo que reciben por comisiones que atienden, que son buenos miles en partes, a veces son muy superior a sus salarios.

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