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Es una historia llena de lágrimas y risas, enojo y encanto, emociones llevadas hasta el minuto 90 de cada partido. Es el caso de los melenudos en la presente temporada, los Potros de Hierro hace un año y de la afición hidrocálida hace tres.
Segunda División se refiere al torneo de segundo nivel en México, hoy Liga de Ascenso
En promedio, los equipos que han jugado al menos una vez en la Primera División desde 1950, han permanecido en el Máximo Circuito durante 22.3 años. Sólo el América y las Chivas, quienes han permanecido en la Primera División desde al menos 1946, han tenido un paso perfecto por esta liga. Ellos representan 25% de los equipos que nunca han transitado entre divisiones. El otro 25% jugó menos de 10 años en la máxima liga y el restante 50% entre 10 y 20 años. Este es el caso de los actuales Jaguares de Chiapas – equipo fundado en 2002 y el cual nunca ha descendido–, los Colibríes de Cuernavaca –que sólo jugaron una temporada antes de vender su franquicia–, Deportivo Neza, Ángeles de Puebla, Atlético Español y Oro de Jalisco nunca descendieron.
Además de estos casos, 12 equipos han tenido sólo una transición entre Primera y Segunda División, incluyenDo a clubes como Pumas, Cruz Azul y Toluca, que una vez ascendidos nunca han soltado su puesto en la máxima liga. Entre estos 12 también hay casos como Marte y San Sebastián, que a pesar de haber subido a Primera, vendieron su franquicia una vez arriba.
Los Leones Negros también conocen el amargo sabor del descenso. Después de su fundación en 1970, lograron su primer ascenso para la temporada 74-75, en donde permanecieron hasta su primer descalabro en la temporada 93-94. El Clausura 2015 pasará a las estadísticas como su segundo tropiezo y su cuarta transición entre Primera División y Segunda. Los melenudos se sumarán al Club León, al Club Deportivo Tampico y a las Cobras de Ciudad Juárez entre los equipos que tienen cuatro transiciones.
Con el mayor número de transiciones entre Primera y Segunda, equipos como el Veracruz y el Zacatepec (con ocho transiciones), o Pachuca e Irapuato (siete transiciones), marcan la pauta de los equipos que más han hecho sufrir a su afición desde la porcentual. Entre todos los equipos que han pasado por Primera División, cada equipo tiene entre dos y tres transiciones entre Primera División y la Liga de Ascenso, y sólo ocho equipos, incluyendo a los cuatro antes mencionados, tienen más transiciones que Leones Negros (más de cuatro).
Medido así, los casos más curiosos vienen con equipos como el Atlante: 62 años de historia en la Primera División mexicana (desde 1950) no impidieron su descenso. Al Atlante se le suma el Atlas, quien también con 62 años de historia, ha descendido tres veces (con lo que acumulan cinco transiciones entre Primera y Segunda). El promedio de todos los equipos que tienen más de 50 años en Primera División es de apenas 2.2 transiciones. En cambio, los equipos más inestables son los que tienen entre 30 y 40 años en la máxima liga, con 4.3 transiciones entre Primera División y la Liga de Ascenso. Dentro de estos encontramos a los Tiburones Rojos de Veracruz.
La historia de los ascensos también incluye historias de éxito. Es imposible olvidar la hazaña de equipos como el Celaya, que quedó como Subcampeón en su primera temporada de ascenso al perder por un gol de visitante ante el Necaxa, los Panzas Verdes de Matosas en 2013/2014, Bicampeones durante su tercer y cuarto torneo en Primera División después de su ascenso. Algo similar fue logrado por el Atlante, Campeón durante la Temporada 91/92, dos torneos después de su ascenso, o el mismo León en la temporada 90/91. Estas historias de éxito son historias raras: sólo 3% de los equipos logra el campeonato en sus primeros cinco torneos después del ascenso.
El fracaso actual de Leones Negros tampoco es un caso único del fútbol. Pachuca y Monterrey descendieron en su primera temporada durante el 57/57 y 92/93 respectivamente, y durante los torneos cortos, Pachuca descendió en el torno de Verano 97 después de apenas haber ascendido el torneo anterior, mientras que el Necaxa tuvo la misma suerte en el 2011. Entre todos, 75% de los equipos que ascienden a Primera División quedan entre los 50% peor calificados en su primer torneo, y la mitad de los equipos queda en esta categoría en sus primeros cinco torneos.
Hoy los Leones Negros tienen la oportunidad de lograr lo que ya alguna vez lograron: después de su primer ascenso, lograron dos subcampeonatos seguidos en su segundo y tercer torneo posteriores, algo que sólo han logrado 2.9% de los equipos ascendidos. Hoy la afición melenuda llora. Mañana, tal vez, estarán festejando.
