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* Lesiones, suspensiones y presión, los ‘enemigos’ recientes del Tri.
* México debe ganar la Copa Oro 2015 si desea pelear por la Copa Confederaciones.
La supuesta superioridad que la Selección Mexicana debería mostrar en CONCACAF se ha visto opacada en las más recientes ediciones del torneo que corona al mejor combinado de la región por diferentes factores que han convertido la Copa Oro en una serie de amarguras para el Tri.
Si bien ya la baja de Héctor Moreno había sido un duro golpe, con lesión de “Chicharito” Hernández la Copa Oro parece ser “desgraciada” para la Selección Mexicana, que deberá encarar la edición del 2015 como en las últimas cuatro ediciones, un dolor de cabeza ante el que los diferentes combinados nacionales han tenido variadas reacciones.
Fue en el lejano 2007 cuando la “desgracia” comenzó. Aquella ocasión el Tri era comandado por Hugo Sánchez en lo que representaba el primer torneo oficial del timonel al frente del combinado nacional. Todo fue tranquilidad hasta la Final donde México chocó con Estados Unidos y entonces llegó la catástrofe.
El Tri cayó por primera vez en una Final ante los norteamericanos cuando aún no cerraba la herida de lo acontecido en el Mundial de Brasil y para agravar la situación, el equipo de las barras y las estrellas se hizo con el boleto de la CONCACF a la Copa Confederaciones 2009 que se disputó en Sudáfrica y en la que Estados Unidos disputó la Final ante Brasil.
Dos años más tarde, la Copa Oro se ganó pero no por ello dejó de tener lapsos de amargura. La presión estaba a tope después de una mala Eliminatoria de cara a Sudáfrica 2010, situación que se vio reflejada en la polémica patada que el entonces DT Tricolor, Javier Aguirre dio a Ricardo Phillips, jugador de Panamá y que le valió una suspensión del organismo rector del fútbol en la zona.
Para el 2011 México acudió con su mejor cuadro al torneo pero las malas noticias volvieron a aparecer. Tras golear a El Salvador en el duelo inaugural, cinco jugadores mexicanos dieron positivo por Clembuterol, situación que los dejó fuera del torneo y que generó un problema que duró varios meses.
La reacción del Tri fue llena de coraje al llevarse el título que le permitió jugar la Copa Confederaciones del 2013 en Brasil en una Final que comenzó perdiendo ante Estados Unidos.
En el 2013 fue una la llave que desató la presión. La Eliminatoria de cara a Brasil 2014 comenzaba a ponerse oscura, la eliminación en la primera ronda de la Confederaciones no ayudó y la Copa Oro terminó por ser la presión que meses después decantó en la salida del “Chepo” de la Torre.
México acudió a la última edición del torneo con un combinado “B”, mismo que no logró superar las Semifinales al caer ante Panamá y dejó el título en manos de Estados Unidos.
Cuando todo parecía bonanza para el DT Miguel Herrera, a la presión de ganar sí o sí la Copa oro 2015 para buscar la Confederaciones tiene como nuevo “aliado” el fracaso en Copa América, la baja de Héctor Moreno y la lesión de “Chicharito” Hernández.