Madonna celebró este fin de semana su 57 cumpleaños por todo lo alto, con una fiesta temática organizada en uno de los enclaves vacacionales más exclusivos de Estados Unidos: los Hamptons. Allí tuvo lugar la fiesta gitana de la cantante, a la que además de sus cuatro hijos -Lourdes, 18, Rocco, 15, y los pequeños Mercy y David, de nueve- asistieron atractivos y jóvenes varones con los que la cantante acostumbra a dejarse ver.