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* Chivas solo tiene un triunfo en los últimos siete partidos ante América.
* Ambos equipos no contarán con dos jugadores titulares por suspensión.
Tan disparejo como si se tratara de David contra Golliat. El momento que viven ambos equipos y el pasado de los últimos tres años que acarrean son los argumentos principales para considerar la edición 219 del Clásico Nacional como uno de los más disparejos en la historia del enfrentamiento entre los dos equipos más ganadores del fútbol mexicano.
La Tabla General marca 10 puestos y ocho puntos de diferencia y la Porcentual hace aún más evidente la divergencia que tienen ambas instituciones. Hoy compararlas parece atentar a la inteligencia futbolística pues hay un claro favorito y otro que llega con el papel de víctima.
Ese momento se refleja claramente con los apenas dos triunfos que suma Chivas en los últimos siete Clásicos, más allá de pensar en calificaciones a la Liguilla o títulos tanto locales como internacionales.
El Estadio Azteca luce como el escenario perfecto para que América, el obligado a sacar el triunfo, demuestre el potencial que lo pone en los primeros puestos y haga valer el orgullo e incluso haga aún más aguda la crisis que vive el Guadalajara con un DT que dirigirá su tercer partido en el banquillo rojiblanco y que será ya el más importante de las 17 fechas que se juegan.
En cuanto a plantel, ambos equipos sufrirán la baja de un elemento titular, aunque ese punto se antoja como la única desventaja para América, ya que no contarán con su goleador; mientras que Chivas no tendrá a Fabián quien no era titular con el anterior entrenador. Este partido se llevará a cabo el sábado 26 de septiembre en el Estadio Azteca, en punto de las 17:00 horas.
