M. Sánchez Vargas. Si aún a sabiendas de lo que iba a pasar se arriesgan, es que la historia y los nuevos avances de la humanidad lo exigen; bien está, que ya después los mismos electores que le dieron el triunfo a siete gobernadores del PAN para completar 12 en la República, se entiende que con cualquier alianza podrían avanzar más rápidamente que mi partido el PRI; no solamente desvanezca su poder, sino que se obligue a la creación de otros partidos que echen montón, porque los mismos ricos y pobres saben que los de Acción Nacional no saben gobernar y además es un cúmulo de ricos, que nacieron con el fin de defender sus ahorros en los Bancos, allá por el año del 38 del siglo pasado, con la clara simpatía eclesial.
Y ahora que la misma ha declarado por conducto de su vocero y una de las Arquidiócesis que sí participó por estar en contra de lo que hizo el Presidente Peña Nieto en reconocer como legal los matrimonios gays, que consentirlo, equivaldría a su muerte misma. Así se formó el movimiento del cristerismo, porque Calles se fue en contra disque para que la Iglesia no les robara la conciencia de los niños. Tal grito brotado oficialmente en Guadalajara, hizo eco, porque ya los ricos de entonces no solamente querían en parte al país, sino todo el territorio, porque así se le insinuaban desde la Sede del Vaticano.
En el caso que nos vemos, quienes observamos con todo respeto que el ejemplo de Cristo, al pedir la moneda para explicar que no se podía un único en dirigir al humano, pidiendo la moneda con la que se comerciaban las compras, que mostrándoselas dijo que de quien era la cara y al oir la respuesta de quien, dijo: asi, lo que es del César, al César y lo que es Dios de Dios, que era lo espiritual, no lo comercial.
