Los Presidentes municipales deben de temerle a una sola entidad, el Congreso de cada Estado, ya que este puede destituirlos, no importa si han ganado legalmente, claro bajo ciertos criterios, pero sí cuenta con el poder necesario para quitarlos de su mandato y un presidente municipal independiente, como lo es el niño «berrinches», Alfonso Martínez. debería temerle más, ya que el y su administración no cuentan con una partido político o representante alguno que abogue por el dentro de esta legislatura.
Bueno para no hacérselas larga, a el independiente le vale literalmente «madres» y lo afirmó el día de ayer al declarar que «El Congreso no incentiva el cumplimiento de las leyes», ¡Sopas!, por no escribir algo con mayor volumen.
Todo por le quieren cambiar la ley de tránsito y movilidad que el cree que se está inventando y como ya se apalabro con la empresa que le llevó el proyecto de las fotomultas y como le va a tocar una partesita de cada multa pues le está doliendo en el bolsillo de su futuro y le aclaro lector, estoy seguro que le va a tocar algo de dinerito, ya que estuve presente en una reunión y supe de varias donde esta empresa le ofreció dinero a otros, no uno, sino varios, expresidentes a cambio de implementar este sistema de verificación de velocidad automático y cobrar más multas a favor del municipio.
Pero dejando lo de la mordidita, ya que este Presidente no quiere robar poquito como dice el de Nayarit, parece que se quiere satisfacer a lo grande, yo le comente al independiente una vez, que debería tener mejor relación con el Congreso, cabildeando y atendiéndolos, pero el se jactó y dijo que no los necesitaba, que el prefería tratar con el Congreso Federal, ya que sabía que aquí no tenía trato y así fue, usted lo puede ver, el independiente no tiene relación alguno con el Congreso, quizá tenga algún trato con el PRD, ya que este le ayudó a ganar, pero no tiene trato alguno con el PRI o el PAN y ellos sumándose son mayoría.
La diplomacia es el mejor trato en la política y se debe de tener cuidado con las acciones, pero al parecer el niño “berrinches” cree que puede sin nadie y el sólo es omnipotente.
