MSV.- Acá siquiera ya pasó la crisis de Morelia de… se vende, pero donde los presionadores no acuerdan sus dominios, el temor es total, como para que todos los que tienen algo, fácil se decidan a rematar o a que alguien administre y les deposite. Aquí en Ixtapa Zihuatanejo el letrero único en todas las fincas turísticas, es de se vende o renta, es decir, que los propietarios por temor no las usan y no estar en el riesgo de que sus cabezas amanezcan a media calle, mejor las encargan que se las renten o se las rematen. Los precios, según reportan ya no son ni un cuarenta por ciento de lo que hace 8 meses, todavía las ofertaban.
Algunos que sin saber rentan, lo hacen por semanas, lo que sirve cuando menos para activar el desempleo que también es un látigo permanente. Lo anterior quiere decir que este fenómeno no está dentro de lo tradicional del amor que se le tiene a un gasto de esta naturaleza que se hace con el sudor de lo que se gana, sino que hay que recordar que cuando se creó el emporio de turismo que hoy es Ixtapa, los encargados que construyeron, lo hicieron con dinero prestado por los Estados Unidos, que tenía el siguiente mensaje de Echeverría: hoy nos prestan oro, cuando paguemos vamos a cumplirles con tepalcates, por lo que este jirón se hizo con derroche de dinero, otorgando créditos, no como engaña Elektra a sus clientes de pagar en abonos chiquititos para que pueda, sino que aquí se dio el caso de que miles de influyentillos se dieron el lujo de tener un descanso en el mar, haciendo patria de gastar en vuelos aéreos, para “ayudar a esa industria del transporte.
Quizá por eso no les duele rentar o vender, sino que con otro “también”, a lo mejor ya murieron, ya se cansaron de descansar o vaya usted a saber, porque sepa que un veinte por ciento de adquirientes, terminaron de pagar y nunca han vuelto a sus propiedades, porque la compra la hicieron a nombre del cuate o del segundo frente que no sabe ni cómo comprobar ser la dueña o propietario.
Escribo de aquellos tiempos en que se tiró dinero a pasto, pues nos prestaron tanto, que Echeverría admitió la doble plaza magisterial, el doble empleo burocrático y ya no se diga de la libertad para disponer del erario a funcionarios de confianza., con decirles que ese Presidente se dio el lujo de perdonar la deuda más grande del país, que fue la de los ejidatarios, cuyo Banjidal, fue su cartera de recibir y recibir y nada de pagar.
Recuerdo que ese discurso tuvo su base en que cómo era posible que quienes habían hecho la Revolución Mexicana, no volverían a tener crédito porque sus parcelas ya no le producían lo mismo, que desde esos momentos, todos los que debían a esa institución crediticia, estaban libres y limpios, dignos nuevamente para volver a tener préstamos y re empezar a sembrar sus tierras.
Pues bien, más o menos es el caso de Ixtapa en donde todo fue en pago, -así se cree- a líderes nacionales que nadie dijo que Echeverría empezaba a hipotecar a México y que fue quien repartió terrenos y créditos para construir lo que ahora tiene un solo letrero: se vende o se renta.