CIUDAD DE MÉXICO.- Benedicto XVI prometió este jueves «respeto incondicional y obediencia al nuevo papa», ante los cardenales que se despidieron de él en El Vaticano, en su último día como sumo pontífice.
El papa Benedicto XVI se despidió de los cardenales presentes en Roma, en un breve acto en la Sala Clementina de la Santa Sede, lugar donde hace un par de semanas sorprendió al mundo al anunciar su renuncia al «Ministerio Petrino».
Angelo Sodano, decano del Colegio de Cardenales, quien a partir de este 28 de febrero a las 20:00 horas, tiempo de Roma se convertirá en la máxima autoridad de la Iglesia Católica en lo que se elige al sucesor de Benedicto XVI, habló a nombre de los presentes.
En su discurso Sodano agradeció al Pontífice saliente su labor, al frente de la Iglesia con una frase típica de la tierra natal de Benedicto XVI: «Que Dios lo recompense».
En su intervención Benedicto XVI les dijo a los cardenales que fue una alegría caminar con ellos durante los casi ocho años que duró su Pontificado.
Señaló que el Colegio de Cardenales es la expresión más clara de la unidad de la Iglesia. Añadió que la Iglesia es un cuerpo viviente que despierta día con día en cada uno de sus fieles. Subrayó que estará muy cerca de ellos con la oración y la meditación.
Por último Benedicto XVI impartió la bendición apostólica a los presentes.
