Ya está demostrado que el PRI es un mal gobierno porque a la mitad del periodo constitucional ni siquiera termina de consolidarse y con eso, también evidenció que es un partido donde prevalecen los intereses mezquinos, sobre los que tienen los michoacanos, aseguró el líder de la expresión perredista Nueva Izquierda en Michoacán, Juan Carlos Barragán Vélez.
El ex regidor moreliano y ahora funcionario en la delegación de Coyoacán en el área económica, recriminó que en los casi dos años de administración priista -de un periodo de 3 años y 7 meses-, no se hayan dado resultados positivos para la entidad, sino adversos en cada una de las áreas:
“Lo único que conocemos es un gobierno que no ha brindado estabilidad política y que desde el principio exhibió intereses económicos, tanto personales, como de grupos, que resultaron en un Estado sin desarrollo, sin empleo, sin seguridad pública, ni oportunidades para la gente”.
Barragán Vélez continuó que esa es la razón porque que esta semana el gobernador interino, Jesús Reyna García, se va por la puerta trasera.
Y con todavía un escenario incierto en la entidad, sobre quiénes gobernarán, puntualizó que urgen cambios estructurales en la administración y una mayor oferta a la ciudadanía, que dé resultados tangibles ante la falta de seriedad de ese partido político.