La Procuraduría General de Justicia de Guanajuato y familiares de Ygnacio López Mendoza afirmaron que el Alcalde de Santa Ana Maya fue torturado y asesinado, de acuerdo con datos de la necropsia, de acuerdo a una nota de Reforma. “Hace unos minutos hablé con la familia a Santa Ana Maya y nos han confirmado que la Procuraduría del Estado de Guanajuato confirma que fue torturado y muerto”, dijo Ricardo Bautista, presidente de la Asociación de Autoridades Locales de México, A.
“El cadáver llegó a Santa Ana Maya, de Celaya, Guanajuato, que son muy vecinos, Santa Ana está en Michoacán; llegó a las 5 de la mañana y se hizo la necropsia en Celaya”. Indicó que López Mendoza recibió llamadas intimidatorias del crimen organizado días antes de su muerte para exigirle parte de los recursos que había obtenido con su huelga de hambre, realizada en octubre en el Senado.
“Él hizo algunos comentarios el día de antier previo a la reunión de la Mesa Directiva de la Asociación de que le habían llamado, estoy hablando del martes, él tenía una llamada donde ya le estaban diciendo que estaban enterados que producto del ofrecimiento del Gobierno federal a su huelga llegarían recursos frescos para su Municipio y dio entender que le tenía que entrar”, explicó. Bautista reveló que el Edil ya había sido levantado antes luego de declarar en febrero las extorsiones del crimen a los alcaldes michoacanos.
“Él nos llegó a comentar que fue levantado días después de esas declaraciones, y lo llevaron a un Municipio y lo tuvieron unas horas, le dijeron que era demasiado temerario lo que había hecho, pero que le pedían que no lo volviera a hacer”, señaló. Además, recriminó al ex Presidente Felipe Calderón la petición, a través de Twitter, de atraer la investigación.
“Nos suena oportunista sus tuits del (ex) Presidente Calderón. Él fue Presidente, él sabía lo que ahorita está declarando desde hace años, ¿qué se hizo?”, dijo. Por otro lado, informó que la inseguridad ha dejado 47 alcaldes, 50 regidores y síndicos muertos, por lo que pidió la intervención del Gobierno para devolver la paz a Michoacán. El Edil de Santa Ana Maya hizo un ayuno de 18 días frente al Senado en reclamo de recursos para gobernar.
Eso fue en octubre y su protesta rindió frutos: recibió la garantía de que el Gobierno federal le daría dinero. Pero él sabía los riesgos que vivía como Edil en una localidad michoacana agobiada por el crimen organizado. Como la mayoría de la población en su localidad, él también vivía amenazado. Los Caballeros Templarios, según él mismo llegó a confesar a allegados, le exigían una cuota mensual del presupuesto público. Ayer, sus restos aparecieron en su camioneta. Tenía huellas de golpes en el rostro. Al principio, la autoridad michoacana suponía un accidente automovilístico ocurrido en la carretera de Acámbaro, Guanajuato.