Así de esa manera está el PRD, a sobrevivir a como de lugar, no hay otra. Con su cambio de dirigencia y con su nueva campaña de afiliación, este partido espera no ahogarse en su propios problemas. El PRD espera tener 100 mil militantes en el Estado para finales de año, cosa que veo casi imposible, pero a nivel nacional requiere de 275 mil afiliados cosa que me parece que no lo lograrán.
El partido de la izquierda que fundó el Ing, Cuauhtémoc Cárdenas y que por momentos se creyó que iba a mandar en el país ahora esta en suma agonía. Los Chuchos son los culpables de tal enfermedad, se acabaron al partido con decisiones mal hechas, con gasto exagerado, con corrupción, con acuerdos por debajo de la mesa, con haberle negado la candidatura a MALO, con creer que eran omnipotentes.
Pero si a nivel nacional fueron los famosos Chuchos en el Estado fue Silvano, que le está pasando el síndrome de Calderón al querer ser el único dueño de un partido. En Michoacán ya no tiene militantes, los 20 mil afiliados que pregonan, ni creo que existan o son las familias de los que trabajan en el gobierno estatal solamente. En las pasadas elecciones se demostró que el PRD ya no es nadie y que con el paso del tiempo quedará reducido a cenizas, tan es así que el mismo Silvano lo dijo, que muy probablemente será un partido regional solamente.
ahora cuenta con 2 municipios y tiene participación en otros 40, pero ahí no es el que manda. En el Congreso está a punto de desaparecer, por la salida de varios diputados que pertenecían a la tribu de ADN, por lo tanto ni puestos pueden decidir, mucho menos alzar la palabra.
Su famosa meta son 100 mil, pero lo que debería estar pensando es con quien se van a asociar, para librar la siguiente elección dentro de 2 años, donde van a perder la gubernatura. Disculpen si le s digo la verdad, pero yo no veo futuro alguno en ese expartido ahora agrupación.
Pero todo se lo han ganado a pulso, al no dejar que miembros crezcan que se desarrollen, que creen estructuras, por eso los militantes terminan huyendo.
Me dan risa lo que expresan sus miembros, los sueños que palabrean, lo deseos de crecer, pero todo lo hacen a su forma, a su dictadura sin dejar el hueso, del cual no saben vivir.