Muchas personas suelen dudar de la credibilidad de las imágenes en Internet sobre el antes y el después de los que han perdido mucho peso. Una estilista y maquilladora neozelandesa, Simone Pretscherer Anderson, decidió publicar en Instagram su progreso: cómo pasó de 169 kilos a 83.85 en sólo once meses, lo cual significa una pérdida de más de 82 kilos. En vez de ignorar a sus críticos, Anderson les respondió con otra foto brutal de su barriga, donde se puede ver la cantidad de piel que ha sobrado después de perder tanto peso.