M. Sánchez Vargas. Dentro de los 3 ajustes para que se logre al pie de la letra el nuevo plan educativo principalmente donde las organizaciones sindicales traen “azorrilladas” a las autoridades educativas y al personal que integran sus administraciones, se empezarán a cambiar, primero Chiapas, luego Michoacán y en seguida Guerrero, las SEEs, ya que Oaxaca empezó a dar buenos resultados la modificación que se hizo en su SEE que fue convertido en su Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, (IEEPO); para proseguir esta medida en entidades donde los profesores hacen más caso a quien los liderea, que a quien les paga, eso podría suceder muy en breve.
El propósito es llegar a la total aplicación de la reforma educativa, cumpliendo medidas de que los que se han contratado con la SEP para educar a todo mexicano desde el inicio educacional, hasta el nivel preparatoria, cumplan con lo que se ha firmado en el contrato colectivo de trabajo, cuya titularidad es con el SNTE, no con la CNTE que tienen en ascuas a los que representan a la SEP en los estados de la república mexicana que vigilan el cumplimiento de las tareas de trabajos educacionales.
Como los conflictos que se avecinan, no son tan fácil de evitarlos, ya que no es nadamás ordenar a que se cumpla esto o se consiga lu otro, porque se puede ordenar, pero falta que consientan de seguro los que van a ser desplazados por indisciplinarse, ya que para ellos, primero está su dirigencia sindical, que serían desde luego los culpables de dejar su trabajo, por apoyarlos.
Hay que comprender que muchos los que faltaron a sus trabajos, lo hicieron porque en su sindicato, también son amenazados, si no cumplen la línea sindical, que los castigan en sus derechos. Por una parte pues, pobres de los profes y la otra, quien les paga, que no encuentran la forma de que se llegue a un acuerdo que beneficie a todos, principalmente a los que reciben esta educción oficial.
Por eso, ya hay apuestas de que los desplazamientos que anuncia la SEP, por conducto de su director Aurelio Nuño, podría quedar en puras amenazas como siempre, hasta ahora, que no han dejado de pagarles el salario completo, ni menos despedirlos.
