MSV.- Es asombrosa las respuesta que he encontrado con quien o quienes hemos hablado del jiro que toma la nueva libertad para que se formen nuevas religiones y nuevas sociedades, con eso que el Papa Francisco I deja atrás los de los gays y el aborto, porque solamente nuestro superior, puede juzgarlo, porque en realidad –se dice-, él no castiga, sino que cada uno, tiene su propia consideración del por qué los sucesos.
Siempre se ha dicho que así como los masones consideran a Dios como el arquitecto del universo, nosotros mismos tenemos de esa manera el concepto de lo que somos y ahora más, una vez que nuestro temor de comportamiento moral, social y material, nos va a permitir juzgarnos como lo creamos conveniente, aunque de acuerdo a nuestras necesidades, nadie va a querer seguir de pobre y eso nos puede poner, como en los gritos que están dando los que no alcanzan alimentos que para algunas comunidades, está mandando el gobierno o el sentimiento anónimos de la humanidad, porque en la rebatinga dicen: sin orden, vamos a terminar por matarnos, si no es por igual el socorro social.
Se advierte que la existencia, ya va a ser más de inteligencia y trabajo, que de orgullo y presión, como la hija de Elba Esther Gordillo, que se adelanta a renunciar como la dirigente del partido que creó su madre, antes de que la corran y no motive el acabe ahí la la ganancia de los vividores que siguieron a la ex líder magisterial, sino que por desprestigio y falta de capacidad, le promuevan al suplente de su senaduría, porque todo lo que huele a la Gordillo, está perjudicando ya que solamente con los pies por delante, la maestra podrá salir de la penitenciaría donde se encuentra privada de su libertad, sin que ahora nadie de los priístas que unió a Vicente Fox para que fuera Presidente y no estuvieran en su contra, hoy han intercedido por ella, aunque le fiscalizaran sus bienes, pero libre para vivir sin tanto amargo que denota en su rostro y además, que lo manifiesta y lo dice, viviera el resto de sus día, porque por sus enfermedades y más que aumentan cuando ya se carece de poder y de dinero, le aumentan a uno.
Asi es de que cada quien, de ahora hacia adelante, las nuevas generaciones sin el temor de Dios, que conocemos como el espíritu de nuestra creencia en él, tendremos que utilizar para nuestra expresión hacia la humanidad, una sola forma de las dos que conocemos para hacerlo, que es la prosa o el verso, lo que usaba Cristo, para hacer pensar el por qué de nuestra existencia, la parábola bíblica.
