Difícil la Operación Difícil la Recuperación Comadre, en las curaciones hay un riesgo del 25 por ciento, en una operación 50 % y en la recuperación es el resto, porque acuérdate tantos que han operado simplemente de la péndice que sale bien todo y en la convalecencia que no se cuidan o no la cuidan con el orden debido, algo les resulta que los tienen que volver a operar y quedan mal, que mejor les cierran, tal como les hacen a los que ya están en estado de metástasis, que mejor les vuelven a cerrar y hasta que mueren. Sí es cierto comadre, como tantos entrañables como al que le decíamos la princesita del Lago de Pátzcuaro que fue su edil y luego se lo trajo José Servando a Artesanías que ya le entraba hasta las carnitas y las chelas, pero que de pronto de lo mismo lo tuvieron que intervenir y ahí quedó; por cierto muy amigo de Carlos Arteaga Paredes que casi gobernaba en lugar del hermano de Ausencio que sustituyó a Gálvez Betancourt que se fue al Seguro Social con Echeverría. Lo que no me gusta comadre es que no sabemos de qué lo operan… En esos caso se dice lo general, menos lo específico. Pero mira, lo importante es que cuando lo preparan a uno para una operación, es que se elimina el 90 por ciento de riesgo, bueno, hasta da tiempo para quienes lo parecían, de echarse una oración al Señor, para que haya menos riesgo de una desgracia, porque sea lo de cada quien –ahora más lo dicen-, era muy jalador. Pues que mañana a las siete por fin lo intervienen.
