Por la costumbre política que tenemos tradicionalmente en esta época que vivimos, está raro que no se pare a tiempo los desastres estudiantiles, que brotan constantemente por los libertinajes que se le han protegido a los que bajo la bandera de ser estudiantes, el gobierno les tolera todo.
Entonces comadre, que entiendes del problema de los normalistas, que ya daban por hecho la caída de cabezas para atenuar la petición estudiantil.
Pues que el gobierno Federal está dispuesto a cargar con los desastres que se avecinan de los normalistas y grupos que les gusta respaldar a los caídos o que no triunfan en sus luchas.
Comadre, entonces como la educación es federal, el responsable de ella va a tener que sortear o resolver de alguna manera, las consecuencias de los normalistas de Ayotzinapa, empezando con que lo que resulte de desmanes por las marchas que por varias entidades ya empiezan.
Pues si comadre, porque si las manifestaciones fueran como las que hizo la familia politécnica, estaría a todo dar, pero ya ves que no faltan infiltraciones vandálicas que ocasionan muy lamentables desahogos, no solamente contra el normal desarrollo de actividades comerciales industriales o institucionales, sino que en los destrozos que cometen y el gobierno no restaura esos daños a particulares, pueden producir verdaderos desastres. Por lo pronto el perdonarle la vida al gobernador de Guerrero ya es anunciar que el gobierno Federal, asi lo quiere.
Así se ve comadre, nadamás que la sociedad no siente que volvamos a la tranquilidad, sino a seguir en la incomodidad que va limitando la prosperidad social y seguir estando sujetos a que inquietudes estudiantiles, les destrocen, no los dejen en libertad para obtener los recursos de vida, es equivalente a que estamos en el completo desamparo de justicia.
