El hecho de que el Ejército se haga cargo de la seguridad del Puerto de Lázaro Cárdenas y que al llegar a laborar el presidente municipal a sus oficinas se haya sorprendido de lo que estaba pasando que dijo que no sabía ni qué “onda”, entra dentro del círculo de que sorprenda, puesto que por una parte si a los policías municipales los mandaron a que se vistieran de civiles a sus casas y regresaran para cumplir su horario de empleados del Ayuntamiento, es que no los cesaron, sino cambiados de labor y en lo que respecta al edil de que no sabía ni qué “onda”, el señor Secretario General del Gobierno del señor licenciado Fausto Vallejo Figueroa, dijo que esta medida era producto de un acuerdo concebido en función de mejorar las condiciones de seguridad de ese puerto donde hay cuantiosos intereses internacionales y que se deben capacitar mejor a esa fuerza policial municipal.
Pues comadre, yo no lo entendí así, como todos los habitantes…
Pues cómo lo iban a entender si allá todo es tensión, que cualquier movimiento de esta naturaleza, asusta.
Po’s también la forma y en qué horas el arzobispo fue sacado de sus aposentos para ser llevado al cuartel de los soldados a las dos de la mañana, porque lograron captar comunicaciones de que a esa hora iban a matarlo los que con la procesión se sintieron ofendidos y decidieron eliminar a otro de los que no están de su lado, porque su interés de plano es que el pueblo pida al gobierno que retire a sus soldados de la zona, que ellos se encargan de la tranquilidad de la región, al estilo del tiempo de los caciques.
Ufff comadre, esto está de la patada, como amanecieron las especulaciones de los que ya se quieren ir del PRD, unos discretamente regresando a su PRI y otros, descaradamente con su Peje, que es con el que se fue la Fabiola Alanís Sámano que en mucho tiempo dijo que ella daba la vida por su PRD, de la que fue su primera presidenta y diputada por uno de los distritos locales de Morelia.
