Deportes – Grupo Diario de Morelia
Al final no fue tan inoportuna la lesión de Miguel Layún, quien confió en volver a tiempo tanto para disputar la última recta del Clausura 2014 como para ser considerado hacia Brasil 2014.
El defensa del América explicó que en el mejor de los casos podrá estar de regreso a la actividad en dos semanas, si su recuperación es óptima y el cuerpo le responde de la mejor manera.
“Son de esas noticias que nunca son agradables ni cuando le pasa a uno ni cuando le toca a un compañero, pero hay que sonreír, levantar la cara, disfrutar la vida y en este momento trabajar”, expresó.
“Tengo que rehabilitarme rápido, estar lo más pronto posible para el equipo, con las metas bien firmes, que siguen siendo hacer un gran torneo con América, regresar a los primeros planos y después volver a la Selección para meternos de lleno en la pelea para el Mundial”.
El lateral recordó que el torneo pasado padeció una lesión en el tobillo que se pensó le impediría llegar a la Liguilla, lo que finalmente no sucedió porque estuvo a tiempo de regreso.
Aunque aseguró que todavía hay mucho tiempo para sanar y recuperar el ritmo futbolístico, aclaró que de ninguna manera se siente seguro en el Tri.
“En estos momentos para nadie es sano sentirse seguro, todos debemos luchar, buscar la manera de mantenernos en el máximo nivel”, manifestó.
En ese sentido, mencionó que ayer, cuando todavía estaba latente la posibilidad de una cirugía, llegó a comentar con su familia que prefería quedar fuera del Mundial por una lesión y no porque dejara de ser convocado por cuidarse.
“Hay lesiones que son menos oportunas que otras y en este caso, afortunadamente no fue tan grave como se pensaba”, agregó. “El hecho de estar en un par de semanas quiere decir que es mucho tiempo lo que falta”.
Explicó que su rehabilitación consistirá en mantener lo más inmóvil posible el hombro, donde el diagnóstico fue una subluxación, además de sesiones de fisioterapia y gimnasio.
Además descartó que la barrida por atrás de Javier Cortés hubiera sido con malas intenciones. “No me gusta pensar mal de mis compañeros de trabajo porque yo nunca tendría una entrada para buscar lesionar a alguien, fue una jugada circunstancial en una barrida por atrás, caigo mal y esto ocasiona la lesión”, detalló.
LLENAN LA CAMISETA Cuestionado si le dolía más el hombro o la mala racha de las Águilas, reconoció que las tres derrotas en fila no son agradables pero aclaró que en parte son por la mala fortuna, pues consideró que a los últimos rivales les ha sobrado la contundencia que a ellos les ha faltado.
“Me duele que no consigamos los resultados que queremos, es algo que cuesta, es difícil porque nosotros siempre queremos que la gente salga feliz, más en este tipo de partidos”, expresó.
“Grande la playera no nos ha quedado. La diferencia es que el torneo pasado las metíamos y ahora nos está costando”.
