Será verdad, será mentira será la vieja del otro día, quien sube dijo el de los caballitos, el chiste es que cuando la perra es brava, hasta a los de casa muerde y es que déjenme chismearles que en la mismísima instalación del Servicio Médico Forense mejor conocido como Semefo a un perito criminalista le hurtaron una cámara de video y tres memorias USB, por lo que ni tardo ni perezoso fue con el chisme pa’ que no le vayan a cobrar el equipo a él.
El “machetazo a caballo de espadas, fue después de que el especialista denunció los hechos formalmente ante un funcionario Social del monasterio público, en donde según el chisme vertido semioficialmente ¡ups! es decir de acuerdo con las primeras indagatorias, el afectado dejó, como regularmente lo hacía, parte de sus herramientas de trabajo dentro del archivero del consultorio número dos de donde desaparecieron misteriosamente.
Chismeo muy compungido que cuando necesitaba los objetos para emprender sus actividades buscó en el referido casillero, pero no los encontró, motivo por el cual sospechó que alguien se los apropió ilegalmente, la desaparecida videocámara que ya estará “tostoneada” es de la marca Panasonic, modelo DMC7S5PUK, de 12 megapíxeles y de color negro, el perito chismeo que tiene cerca de 10 años camellando de perito y nunca le había pasado algo similar.
