Deporte extremo que está ganando presencia en Irán. Caminar a través de un slackline (una cuerda de acero) anclado entre dos edificios durante la práctica en Teherán, Irán. “Difícilmente se puede describir la sensación de andar de puntillas a través de un abismo en una cinta delgada que se inclina ligeramente hacia abajo”.