El desmantelamiento de una banda de presuntos secuestradores y robacarros que operaba en las zonas residenciales de esta ciudad de Morelia, siendo capturadas 10 personas relacionadas con esta célula delictiva, la cual pertenecía al crimen organizado, fue otro anuncio que hizo el procurador del estado, José Martín Godoy Castro, en la rueda de prensa que ofreció la mañana de este lunes a los medios de comunicación, en las instalaciones de la dependencia que encabeza.
Asimismo, el funcionario refirió que durante estas acciones hubo un enfrentamiento a balazos entre los ahora indiciados y los policías ministeriales, sin que se registraran bajas de ninguno de los lados.
Explicó que entre los 10 imputados están nueve hombres y una estudiante de Bachillerato, mismos que eran encabezados por quien fue identificado como Rafael Á, alias “El Fay” o “El Michoacano”, quien fuera jefe de plaza de una organización delincuencial.
Al respecto, Godoy Castro preciso: “La desarticulación de este grupo, se realizó luego de que el pasado día 05 de enero, privó de la libertad a un joven empresario y por cuya libertad exigieron a sus familiares una importante suma monetaria, además de despojarlo de un vehículo de lujo.
“El agraviado fue liberado ileso en una acción operativa realizada en un hotel ubicado en la zona oriente de la ciudad. Ahí inicialmente fueron detenidos tres miembros de la banda, en tanto que los restantes fueron capturados en diferentes acciones que se llevaron a cabo en los municipios de Morelia, Tarímbaro y Tzitzio”.
Igualmente, el abogado del estado añadió que en la comunidad de Tafetán, en la demarcación de Tzitzio, uno de los investigados, siendo justamente el cabecilla de la banda, es decir, Rafael “El Michoacano” trató de evitar su detención y disparó contra un helicóptero de la Procuraduría, sin que lograra cumplir su objetivo de derribarlo.
A esta persona le fue asegurada un arma de fuego, así como 50 gramos aproximadamente de una sustancia granulosa con las características propias de la droga sintética.
En las movilizaciones policiales fueron incautadas seis armas de fuego de diferentes calibres y nueve vehículos de diferentes marcas y modelos, ocho de ellos que fueron robados con violencia en zonas residenciales de esta capital, pues siete de los integrantes de esta célula criminal se dedicaban precisamente al hurto de automotores, los cuales luego trasladaban a un taller mecánico en el poblado de Tafetán.