El fotógrafo Chase Richardson se resbaló y cayó cuando estaba en medio de su sesión de fotos en una boda en junio del año pasado. ¡Pobre hombre!. Pero por fortuna, su falla en la boda no fue en vano porque de ella resultó esta excelente fotografía: Richardson tomó la foto en las nupcias de Kristina y Will Moore en junio de 2014 en el McClain Lodge en Brandon, Mississippi. Había llovido toda la mañana, lo que hizo que el pavimento estuviera resbaloso. «Cuando llegó el momento de tomar las fotos de la fiesta, la lluvia había parado, pero todo estaba mojado», comentó. «Así que decidí hacer la sesión de fotos bajo un patio techado que era básicamente una losa de hormigón. Estaba enmarcando la foto de toda la fiesta, y di un paso hacia atrás y resbalé en un charco. Fue como una especie de momento borroso, pero caí al suelo, se rompió el lente que estaba usando y me corté el dedo. ¡Vergonzoso! Retraté el resto de la boda con un lente roto muy ruidoso y un dedo sangrado».