MSV.- Si va usted a empezar como los “peros” para consensar una ley laboral que verdaderamente nos sirva, se debe comprender que los sacrificios tienen que ser a la par, iguales. Al ser más las conquistas laborales que los privilegios patronales, no olvide que toda la culpa la tiene el gobierno, primero por conservar simpatías para mantenerse en el poder y segundo, que si el Partido Revolucionario Institucional nunca pudo crear su sector industrial, tampoco logró incluir al patrón a la CNOP que por cierto la revive alguien que curiosamente se apellida igual, precisamente porque esa ley urge, no porque tenga color, ya que hasta mire usted, la Iglesia Católica está de acuerdo, nomás que no se frieguen más al empleado o trabajador, que al patrón emprendedor.
Por lo pronto, para la grave situación económica que se viene, piénsele en ahorrar, hasta para el amor fuera de casa y que se ha investigado que el cien por ciento de los que andamos de “coscolines”, como no podemos vigilar 24 ahoras ni menos pagar que otro u otra lo haga, ya deja de ser vergonzoso aceptar que dos han vivido con la misma mujer o dos mujeres con el mismo hombre, porque proporcionalmente por los costos de distracción, organizándose, salen más baratos poniéndose de acuerdo.
Que se puede del triángulo “estaunidense”, llegar hasta la rosca “francesa”, es un acerto, si desde siglos discretamente se practica con gran éxito, de ahí los compañeros de estudio, de enseñanzas empresariales, de integrantes de proyectos, aquis equis…
Si todo lo anterior trasciende como va, muy rápido, vamos a llegar en este siglo a algo peor que los de Sodoma y Gomorra, aunque ya sin religión del trate, sino sin costo y acuerdo libre.
También tendríamos que incluir a los que “algo traman” porque si se da paso a la nueva Ley de Tratas y por la carencia de recursos para vivir la vida de esa manera, que el ahorro viene porque viene pues ya es muy caro y peligroso ese disfrute. Además, antes se necesitaban hijos, ahora sobran y para que antes de que en el año del 2016 que ya no haya un bloque de hielo en los árticos y tengan que venir algunas guerras para bajar a la mitad la población, porque los que vivan, ya no podrán existir, ni lograrlo aunque se lo propongan, dejar de rosearse los aerosoles o dejar la comida chatarra, que como San Pedro al contestar lo que haremos al ser bastantes, no nomás dijo que hacernos pendejos los unos con los otros con eso del vil comercio, sino comernos, que es a lo que definitivamente tendremos que llegar, en caso de que no se unan los países que ya sienten los estragos ecológicos, a que Estados Unidos deja de producir lo que aumenta el ozono, o le declaran entre todos la guerra para que firme el tratado de Tokio.
Pero en tanto, para que no estemos en la recta del fin, que se apruebe, que a la mujer que tenga el primer hijo, se le ligue y luego de diez años, si su existencia va por buen camino, la pongan como el cóctel de vuelve a la vida. ¡Ahhh! y que también al muchachillo que engendra el primero, le apliquen la vasectomía y lo reconecten hasta que acredite posibilidades de ser un responsable e familia.