Entre 2011 y lo que va de este año, 160 mil personas han abandonado sus hogares por cuestiones de inseguridad en 67 de esos casos documentados de desplazamientos masivos, particularmente en el corredor que forman los estados de Michoacán y Guerrero, señala el representante en América Latina del Consejo Noruego para los Refugiados, Steve Hege, publica el periódico 24 Horas en su portal digital.
Steve Hege, coordinador del Centro Internacional de Monitoreo sobre Desplazamiento Interno (IDMC, por sus siglas en inglés), órgano de seguimiento de Consejo Noruego, hizo un recorrido por regiones de Guerrero, donde se entrevistó con grupos de desplazados que le refirieron su experiencia.
El IDMC surgió después de un proceso de diálogo entre el Consejo Noruego y Naciones Unidas, en respuesta a las dinámicas del desplazamiento interno, que no cabían dentro del mandato del Alto Comisionado para los Refugiados. Esas personas (los desplazados internos) se quedan dentro del territorio nacional y no tienen el mismo marco jurídico a nivel internacional.
“En México el desplazamiento se da por varias razones. En el caso de Guerrero hay una multi causalidad del desplazamiento, tanto por conflictos antiguos, por desastres naturales como la contingencia reciente, pero también por crimen organizado y por violencia como extorsión, secuestro, desaparición. La gente prefiere buscar refugio, protección más bien, y seguridad en otros lados, señala el representante.
A partir de 2010 y 2011 ha habido mucha más violencia en el norte, en Chihuahua, en Tamaulipas. Pero a partir de 2011 se ha identificado esta situación en los estados de Michoacán y Guerrero. Mientras en el norte, inclusive en Ciudad Juárez, hemos visto que algunas personas ya han comenzado a volver, después del éxodo masivo de 2010.
Para el especialista, es difícil dar una cifra exacta, porque los desplazados prefieren quedar en el anonimato. Pero nosotros con la Universidad del ITAM en la ciudad de México, hemos identificado 67 casos de desplazamientos masivos solamente desde el 2011 para acá, o sea masivos en el sentido de que son más de diez familias o más de 50 personas.
“El último número que publicamos fue a finales de 2011 en que habíamos estimado, de forma conservadora, 160 mil personas al final de 2011 en todo el país, incluyendo los antiguos desplazados de Chiapas, es decir, 25 mil.
“Ahora estamos en el proceso de actualizar nuestra estimación del número, pero no podríamos dar sino una aproximación a la realidad, la asociación existe en que en las zonas más violentas del país, donde ha habido más extorsión, más control territorial de los grupos de crimen organizado, o grupos armados, pues ha habido un despoblamiento y no se puede negar la existencia del fenómeno.
“Guerrero me parece uno de los estados más complejos porque tiene un trasfondo de muchos grupos armados desde los años 70 y ahora que están entrando otros grupos de Michoacán en las zonas rurales. Lo que me parece importante es que la experiencia desafortunada del estado de Guerrero muestra que también los grupos armados quieren un control territorial y no sólo simplemente extorsionar al individuo. Quieren expulsar a las comunidades para acaparar la tierra y eso no se da tanto en otros estados de México”, destaca Hege.
Para el especialista internacional en Michoacán y Guerrero los grupos de crimen organizado no se dedican exclusivamente al tráfico, sino también al cultivo de drogas, a otras actividades lícitas, como el tráfico de madera, u otras en las que podría haber intereses en la minería.
Por ello, señala que es diferente de lo que pasa por ejemplo en la zona norte del país, donde los grupos se enfrentan simplemente por el control de la ruta, por las entradas al mercado de Estados Unidos.
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