Deportes – Grupo Diario de Morelia
Fabio de Souza llegó a decir “soy un catracho más” y a asegurar que todo futbolista aspira a una Selección.
Pero a diferencia de lo que sucede en México, últimamente con Christian Giménez y Damián Álvarez, el defensa y capitán del Olimpia de Honduras de origen brasileño fue rechazado no sólo por la afición sino por los propios integrantes del combinado centroamericano.
El secretario de la Federación Nacional de Futbol de Honduras, Alfredo Hawit, reconoció que le gustaría ver a la Selección de su país con la misma apertura que en el Tri hacia los jugadores naturalizados.
“México es un país de 120 millones de habitantes y lo único que miramos con extrañeza y que yo quisiera hacerlo en Honduras y me lo aceptaran es tener extranjeros”, aceptó.
“Nosotros quisimos poner uno que no teníamos ahorita para la Copa Oro y los mismos jugadores se rebelaron para que no tuviéramos extranjeros, pero Honduras debe entender que también es necesario hacerlo algunas veces”.
Defensa central por izquierda, De Souza nació en Río de Janeiro y se convirtió en fuerte opción para el DT Luis Fernando Suárez por una lesión del defensa del Hull City de la Liga Premier, Maynor Figueroa, en mayo pasado.
Residente en el país centroamericano desde el 2005 cuando llegó al Victoria, el zaguero se nacionalizó catracho desde julio del 2012 pero ni el año como hondureño le facilitó la aceptación entre los seleccionados que este viernes enfrentarán a México en el Estadio Azteca.
Mientras Hawit añora a los naturalizados en su equipo, en el Tricolor podrán debutar ante el público mexicano y en partido oficial tanto el “Chaco” Giménez como Damián Álvarez, ambos nacidos en Argentina y quienes continúan una tradición que fortalecieron otros “extranjeros” como “Sinha”, Guillermo Franco, Gabriel Caballero, entre muchos otros.
Aun sin naturalizados, Hawit recordó que Honduras aspira a ganar por primera vez un partido en el Estadio Azteca, sin engrandecer al rival pero también sin menospreciarlo.
“Hay que ser realistas, Honduras siempre ha querido ganar y no ha podido y seguirá intentándolo hasta que al final lo logre, porque nadie sabe de lo que es capaz hasta que no lo intenta y eso no es de ahora, eso es de siempre”, agregó.
“Lo más importante de los jugadores es que ellos piensan que son capaces de lograrlo, México es une quipo de respeto y no podemos hacerlo de menos o más”.