Estamos para aplicar el orden, si no mejor me iría a mi casa: Fausto

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El gobernador del estado de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, precisó que las movilizaciones, bloqueos y secuestros de autobuses que han realizado en fechas recientes los estudiantes normalista, es una situación que éstos han demandado a la federación y que «rebotó» en el gobierno del estado, pues considera que este no es un problema de Michoacán.

Entrevistado en el noticiero «Atando Cabos», precisó que la demanda de los inconformes para que no impacte en el estado la Reforma Curricular a las escuelas Normales es una decisión directa de la Secretaría de Educación Pública (SEP), por lo que la intervención del gobierno local se debió principalmente a buscar cumplir su obligación de salvaguardar la paz y la tranquilidad de la población.

«Es una posición muy cómoda luego la de afirmar que nunca se debe agotar el diálogo, sin embargo, debemos preguntarmos cuáles son las condiciones para que exista dicho diálogo y yo respondería que la condición, es que se dé en la legalidad», abundó.

Al ser cuestionado sobre cómo enfrentará esta crisis, que podría derivar en una crisis de gobernabilidad, el gobernador Vallejo Figueroa dictó, «no lo desconocemos, yo en lo personal evalué cuáles eran los riesgos políticos, pero bueno, yo no puedo permitir que estuvieran bajando a media carretera a usuarios del transporte público, gente muchas veces de escasos recursos que no tenían para llegar a su destino porque no traían más recursos económicos. Que estuvieran bajando a familias enteras, que estuvieran parando a vehículos comerciales y yo no hacer absolutamente nada.»

Continúo al afirmar que este tipo de acciones no son tolerables en Michoacán o en alguna otra parte del mundo y añadió «o estamos aquí nosotros para aplicar la ley para que obviamente establezcamos un orden legal o bueno, pues mejor nos vamos a nuestra casa.»

En lo referente a los manifestantes, apoyados por integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que han solicitado su renuncia, el mandatario local precisó que no tiene razones para dejar su cargo, pues ha mantenido la voluntad para el diálogo con ambos grupos, así como que este suceso no debe empañar la relación de respeto y de corrección de algunas cosas sucedieron durante las pasadas administraciones y que la suya no puede tolerar o aceptar.

Asimismo, precisó que los michoacanos están cansados de que recurrentemente hagan uso de este tipo de acciones para mostrar su descontento o tratar de presionar a las autoridades para conseguir lo que desean.

«Estoy convencido y estoy seguro que frente a esa fuerza de movilización, que no desconocemos, la inmensa mayoría de la población también me está exigiendo que aplique ese Estado de Derecho», sentenció.

En este sentido, puntualizó que aunque durante la madrugada de este miércoles, 22 mujeres y 44 hombres vinculados con los disturbios en la región fueron liberadas bajo las reservas de ley, su gobierno deberá sancionar a las personas que han transgredido las disposiciones previstas en la ley.

Finalmente, reconoció que aunque no tiene pruebas concretas que verifiquen la existencia de un movimiento insurreccional contra su gobierno detrás de todo esto, hay algunos elementos y rumores que hablan sobre la existencia de una mano ajena a los normalistas impulsando estos actos.

«Pero bueno, yo debo de ser serio en estas cuestiones y cuando tenga obviamente las evidencias, pues obviamente que las destacaremos. En el ámbito social, en el ámbito político obviamente que flota y mucha gente señala quiénes son las gentes que podrían estar atrás y por qué están obviamente tratan de crear ingobernabilidad», concluyó.

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