La doctora Silvia Figueroa Zamudio platica con cada miembro actual y pasado de gobierno, que ha servido por importantes mandos, sin dejar secuelas, ni haber levantado comentarios por la conducta de su desempeño. Ella será la que entregará las fichas al nuevo gobernador, para que escoja, sin siquiera un ápice de simpatía de su hermano el ex gobernador, Genovevo, a quien los ambiciosos de mando, están visitándolo, porque éste que dice que simpatiza con programas, no con partidos, se muestra como Marco Antonio Aguilar que cuando conoce la materia y desea algo, siempre presenta algo referente con calidad conveniente.
Los comentarios que ha exhalado el ambiente temeroso de que como esta entidad es la única en la república que le queda al PRD, será el reducto de la prosa perredista que no encontrará chamba ni con el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, que ha declarado que prefiere ir a la Presidencia como independiente, que con ese piltrafa de partido que es ya el Partido de la Revolución Democrática y que además la misma Iglesia Católica está ya haciéndole ojitos a esta modalidad de independientes, porque no se gasta mucho dinero, no hay quien los mande ni tengan que dar dinero ni posiciones, de tal manera que serán muy libres de nombrar, ahora sí, a quien quieran y en el lugar que les convenga.
La nueva modalidad acusa que es producto de haber obligado a cada candidato independiente, ha hablar más con la gente que al final de cuentas son quienes los llevan al poder (aunque hayan vendido su voto a otro, porque una lana es una lana).
