Por otro lado, José Miguel Jiménez anticipó que en breve se llevará a cabo una reestructura interna en el Tribunal de Conciliación y Arbitraje con la finalidad de abatir ese rezago existente de siete mil 500 demandas individuales.
Consideró importante que el Tribunal culmine este año con el menor rezago posible, pues el próximo será un año electoral, de alternancia en las administraciones, y por los mismos despidos injustificados que se dan, se estima que la carga de trabajo se podría cuadruplicar.
Indicó que debido a la falta de atención que administraciones pasadas tuvieron hacia este Tribunal, actualmente atiende procesos laborales de los tres poderes y los 113 ayuntamientos michoacanos con menos de 60 personas.
Con un presupuesto de once millones de pesos, cinco millones más que el año pasado, este mismo año se habrá de concretar la reestructura interna, que contempla la incorporación de otra sala de audiencias, la apertura de un área de peritos y de una área especializada para que acuerde radicaciones de demanda, estaciones de demanda, reciba convenios fuera de juicio y lleve a cabo los trámites procesales para la declaración de beneficiarios cuando el trabajador fallece y tienen que cubrírsele prestaciones a sus beneficiarios.