Nadie hay en esta vida ni en ninguna otra que ponga en cintura a los transportistas, quienes hace de las suyas a diario y pos la neta en este mamotreto ya estamos cansados de publicar sus pendejadas pero pos es necesario seguir chismeando por lo tanto les platico que un morro está delicado, grave pues.
Después de que se pegó en la olla de los pensamientos mejor conocida como cráneo además de los putazos del cuerpo, los hechos ayer cuando se bajaba de un camión de pasajeros del servicio público dicen que el chofer no se detuvo a bajar al morro sino que le valió madres y siguió su marcha.
Se supo que Misael Pérez Padilla de 22 años iba trepado en un camión suburbano de la ruta Villas del Pedregal al llegar pidió la parada y se apeó pero se cayó y se golpeó quedando tirado sobre las madero a la salida a Quiroga en chinga el chafirete bajo a la gente y se dio a la fuga impunemente, como siempre.
