Morelia, Mich.- Con la intención de proteger la salud de los michoacanos durante la temporada de cuaresma, así como vigilar que las condiciones de la venta y expendio de pescados y mariscos sean adecuadas para su consumo, la Secretaría de Salud en Michoacán (SSM) a través de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios (Direpris), inició con el Operativo de Cuaresma, el cual pretende evitar los brotes de diarrea y hepatitis, así como la presencia del Cólera.
De acuerdo a un comunicado de prensa, al respecto, Alfonso Cervantes Gutiérrez, responsable del Programa de Atención de Emergencias Sanitarias, durante el Operativo se realizarán un promedio de 380 visitas de verificación a los establecimientos dedicados al proceso, venta y distribución de pescado y marisco, incluidos los mercados públicos y móviles del interior del Estado.
Con estas acciones, se supervisará y regulará la existencia de las condiciones necesarias de higiene en los puntos de venta, a la vez de que se efectuarán 800 muestras de productos pesqueros y se harán análisis sensoriales en moluscos, crustáceos y pescados.
Las muestras tomadas serán enviadas al Laboratorio Estatal de Salud Pública, para su análisis y en el caso de detectar anomalías el personal de la Direpris realizará el decomiso respectivo de los productos, para evitar las intoxicaciones por el consumo humano.
Cervantes Gutiérrez, explicó que durante todo el año, el personal de la Direpris realiza monitoreos y toma de muestras en el manejo, conservación y venta de diferentes alimentos; pero que en esta temporada se intensifican las acciones de vigilancia con especial énfasis en los alimentos del mar.
Detalló que de igual manera se refuerza la capacitación a manejadores de alimentos, para evitar riesgos sanitarios; actividad que se realiza durante todo el año.
En estos cursos se orienta a los comerciantes sobre los hábitos de higiene que deben tener al manipular y preparar los alimentos, como productos cárnicos de aves, bovinos y pollos, pescados y mariscos, vegetales y leguminosas, además que se ofrece orientación sobre las medidas de higiene y conservación de los alimentos.
Asimismo, se intensifican las visitas a los expendios, tomando muestras de los alimentos que se venden para detectar la presencia de microorganismos patógenos como la salmonella o el “vibrio cholerae”.
De este modo, se supervisa que todo se encuentre en óptimas condiciones, si se percibe alguna irregularidad, se retiran los alimentos del expendio y se investiga de donde vienen, para aplicar las sanciones correspondientes. Los alimentos tienen riesgo de contaminarse cuando están desprotegidos (sin tapar), o a la intemperie (sin refrigerar), puesto que se contaminan con todas las bacterias que existen, por lo anterior se recomienda:
•Evitar tocar los alimentos con manos sucias.
•Cuidar que no se dejen a la intemperie, evitando que moscas, cucarachas y roedores tengan contacto con la comida.
•Evitar que una persona con alguna enfermedad infectocontagiosa tenga contacto con alimentos.
•Lavarse las manos y uñas antes de tener cualquier tipo de contacto con la comida.
•Asear perfectamente los utensilios donde se coloquen los alimentos.
Los pescados y mariscos en malas condiciones pueden tener un alto contenido de bacterias, que pueden tener riesgos importantes en la salud, por ello es importante que los productos del mar, cuenten con estas características al momento de la compra:
•Ojos salientes y brillosos.
•Agallas rojas y húmedas.
•Escamas muy firmes.
•Superficie brillante y firme al tacto (que el pescado no se hunda cuando se toque con los dedos).
• Olor característico (que huela bien).
•En moluscos, caparazones firmes y sin roturar.