No importa como lo planteemos, la universidad michoacana nunca tendrá dinero para sostenerse y es que por más que consigan, más le piden, entre los sindicatos, los alumnos, la CUL, las casa del estudiantes, etc., nunca habrá dinero suficiente. Nuestra máxima casa de estudios no encuentra la salida, siempre está al borde del precipicio, siempre hay alguien caritativo que le consigue algo para sobrevivir, ya sea el gober o la SEP, pero nunca alcanza y va a haber un momento en que truene la olla, no se pueden acumular los compromisos de todos en un sólo lugar.
Ayer mencionaron que las Casas del Estudiante tienen cerca de 6,000 habitantes registrados, más los que se acumulen, en 35 albergues, pero le cuesta a la Universidad cerca de 128 millones de pesos anuales de su presupuesto, la universidad no es centro de caridad para nadie y menos en estos tiempos, esas casas deben de acabarse, deben de trasladarse a un tipo de becas mensuales a los alumnos que con buen promedio saquen el nombre de la casa de Hidalgo adelante.
Los sindicatos deben de ser conscientes de que no hay dinero que alcance a sus exigencias y que con paros menos se puede pedir, ya que lo primero que exigen los burócratas federales es que se trabaje. También deben de ser concientes que ya no se puede más, que debe de haber un tope de empleados y todos deben de aportar y cooperar.
Los alumnos deberían de pagar algo, aunque sea significativo, no todo es gratis en la vida. Una cuota de recuperación sería justa y necesaria para el plantel.
Y por último la administración, debería recortar personal de confianza al por mayor, y controlar a todos, como, pues como se pueda, Rectoría debería exigir y puntualizar que ya no puede más. Debería recortar gastos innecesarios y ahorrar en lo que se pueda.
