Normalmente los niveles de gobierno deberían tener las cifras exactas de la violencia y delitos que se generan en nuestra entidad, sin embargo, no los traen, son imperceptibles a esos datos. Lo más probable es que el gobierno no tenga la culpa, la tenemos los ciudadanos por no denunciar o avisar a las autoridades, pero los habitantes no denuncian por temor, perdida de tiempo o por falta de esperanza que se haga justicia, siempre se escucha, «No lo van a Resolver».
Los números de estas últimas semanas no son nada alentadores, hemos escuchado alrededor de nosotros, de nuestros colaboradores, como ha habido un incremento importante en los delitos del fuero común.
Personas cercanas a nuestro circulo les ha pasado algo últimamente, ya sea robo, ya sea extorsión o secuestro. Simplemente tenemos conocimiento de dos secuestros que están activos en este momento y las personas cercanas nos han pedido que no mencionemos ni palabra del mismo para no estropear las negociaciones.
Por lo mismo, empieza a haber un efecto hormiga de migración hacia otros estados o el extranjero, tal vez, esto no se de por los delitos solamente, sino puede ser un síntoma también de una débil economía, la cual no dudamos ni tantito.
Desalentador, es pues, oír este tipo de historias donde nadie puede hacer nada, pero el tema de la inseguridad, sin olvidarnos de la economía, es muy triste.
La migración empezó hace unos años con el tema de los malosos tomando por asalto tierra caliente, la extorsión y cobro de derecho de piso era tan común que incluso los que pagaban ya saludaban con afecto a este tipo de personas, ellos migraron a las grandes ciudades, pero al recibir a nuevos habitantes de forma masiva se torna en un problema no solamente de traslado sin de movimiento de delitos. En una zona urbana hay más «clientes» para los malosos y más lugares donde esconderse. Por lo tanto, los habitantes de Zamora, Uruapan y Morelia, deciden migrar a ciudades más grandes o al extranjero.
Una única verdad es que los delitos regresaron de una manera diferente a como se hacían antes y eso descontrola al Gobierno, la violencia está aquí y no se va a ir, porque las autoridades creen que se está controlando y no es cierto o pregunte a sus círculos cercanos y se dará cuenta que regreso con más fuerza.