“Tenemos derecho de una objeción de conciencia, a disentir de una ley humana, que es una ley positiva, pensando que por encima mantienen el fundamento de esta naturaleza que biológicamente, psicológicamente nos dice que hay una complementariedad. Alguien me decía si yo tengo un tornillo, lo que necesito es una tuerca, no otro tornillo”.
El Arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, consideró que si se debilita el matrimonio, “la unión del hombre y la mujer con la posibilidad de transmitir la vida”, no se fortalece la sociedad.
En entrevista se dijo convencido de que por el bien social se debe distinguir el matrimonio de lo que son otras uniones o pactos entre personas que así lo desean. “No estamos en contra de nadie”, recalcó.
Citó lo señalado por el Papa recientemente con respecto al tema, que ningún otro tipo de uniones, que se dan cada vez más, se puede equiparar al matrimonio.
“Estamos en contra ciertamente de las familias a la antigua, donde quizá se ejercía un autoritarismo, donde no se reconocía la dignidad de la mujer, pero estamos a favor basado en la ley natural”.
Recalcó que “la Iglesia no se basa en democracias, en parecer de mayorías o de minorías, la Iglesia tiene su base en la revelación”, pero ahora su argumento se basa en la razón porque creen que se deben respetar las diferencias.
“Es diferente el matrimonio de un hombre con una mujer, que una unión de dos personas del mismo sexo, hay que respetar, se trata de llamar a las cosas por su nombre, matrimonio nosotros creemos pensamos es la unión de un hombre y una mujer, eso no es ninguna ofensa para otra persona, simplemente defender un derecho que también un buen número de personas que tienen esta convicción de que realmente son marido y mujer”.
Suárez Inda dijo que no se trata de imponer, sino de proponer, por lo que considera “tenemos derecho de una objeción de conciencia, a disentir de una ley humana, que es una ley positiva, pensando que por encima mantienen el fundamento de esta naturaleza que biológicamente, psicológicamente nos dice que hay una complementariedad. Alguien me decía si yo tengo un tornillo, lo que necesito es una tuerca, no otro tornillo”, expresó.
Insistió que sería faltar al derecho de terceros quitarle al niño o a la niña el derecho de tener un papá y una mamá.
“Estoy convencido que científicamente y psicológicamente se da este derecho de los niños y faltar ese derecho es quebrantar la convivencia, la paz y el futuro de la sociedad, es mi opinión y creo estoy reflejando fielmente la opinión de la Iglesia”, concluyó.
