No porque crean que soy un hombre de partidos, ni porque crean que no soy democrático, no creo en los personajes independientes. Los personajes que supuestamente se sienten que son totalmente ajenos a los partidos, no lo son, porque alguna vez en su vida han participado en algún partido y se han llevado una partesita del presupuesto, lo que si me gustaría ver, es que llegue un personaje que nunca haya tenido que ver con algún partido tenga experiencia administrativa pública y sea honorable, con preparación hasta de doctorado y que cumpla con los requisitos básicos de educación, cultura y profesionalismo.
Todos los que quieren participar en estas próximas elecciones como independientes son personajes que ya traen «maña» de agarrar del presupuesto, ya saben como porque han estado en algún partido. La gran mayoría han vivido de «mamar» de las finanzas públicas y saben donde comen las gallinas, son rechazados de muchos partidos que no tuvieron fe en ellos o que donde simplemente no pudieron encajar. Pero, de lo que yo me quejo y me quejaré es que no hay nadie que los controle, puede hacer y deshacer, el mejor ejemplo, es el del moreliano, presidentito corrupto que solamente piensa en como sacarle jugo al presupuesto, solamente piensa como meter proyectos donde la corrupción es abundante para poder asegurar el futuro de su familia.
En cambio en los partidos, si algo hace mal alguno de sus militantes que se encuentra en el poder, los jalones de orejas vienen de arriba, las amenazas corren, los palos se dan y por lo tanto hay más control, y simplemente si no cumple se acaba su carrera política, ya no hay escalera para subir y se quedan estancados, ejemplo básico, Samuel Maldonado, que después de su mala participación se acabó o Wilfrido Lázaro que no se le pies ni cabeza.
Los independientes solamente buscan una cosa, hacerse ricos en su periodo, buscan dejar huella con su ego. Esto no sirve para un país democrático, no sirve para una sociedad quebrada en finanzas, pobre en recursos.
Mal ejemplo han dado Jenruchito, alias Alfonsito Martínez en Morelia y Jaime Rodríguez en Nuevo León, escándalos, corrupción y mal manejo y pero ejemplo daría Cocoa Calderón si llegara, ella, una persona que siempre ha vivido del presupuesto y corrupción, todo la familia no sabe trabajar, sabe agarrar solamente, ninguno ha sido de la iniciativa privada.
