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* El arquero señaló que el equipo tiene una deuda en sus duelos de visitante.
Tras cumplir en el inicio del Clausura 2016 con una de las asignaturas pendientes en el pasado torneo al ganar como visitante, William Yarbrough se dijo orgulloso del equipo esmeralda, que más allá de las circunstancias extra cancha en el Luis “Pirata” Fuente, se mataron en el terreno de juego.
“Todos teníamos esa espina de ganar de visitante, ya teníamos rato que no se lograba y más en una cancha como la de Veracruz, que tiene un equipo de garra y corazón, al igual que nosotros; sabíamos que era importante tener la concentración al máximo y sabíamos que no nos podían ganar en actitud”, apuntó el elemento de León.
Yarbrough relató que el partido dejó fundido a todo el equipo, lo cual demuestra que existe un gran compromiso y entrega por mejorar lo hecho en el último torneo, donde fueron de los peores visitantes a pesar de terminar en los primeros lugares.
“Al final del partido los compañeros estaban liquidados y eso habla de la entrega que se mostró en el terreno de juego. Se me pone la piel chinita de saber que estoy en un grupo de 23 jugadores que sienten los colores y que vamos a hacer todo de aquí en adelante para seguir dando alegrías”, detalló.
Acerca de su próximo rival en Liga, el estadounidense dijo sobre la Máquina que: “Tienen gente bastante rápida, un contragolpe muy rápido y muy potente. Cruz Azul es un equipo muy buen dirigido, con Chivas quizá arrancaron un poco lento o distraídos, pero después de que recibieron el gol en contra empezaron a tomar el control de la situación”.
