Son cerca de 600 millones de pesos los que el gobierno estatal adeuda a la Dirección de Pensiones Civiles del Estado lo que ha obligado a los trabajadores a paralizar labores debido a que ya no hay dinero para cubrir los compromisos con quienes cotizan a dicha dependencia.
Desde temprana hora fueron cerradas las puertas de la institución por parte de los empleados quienes dijeron que no tenía caso realizar los trámites cuando no se van a poder cumplir los compromisos.