Chismes fidedignos nos contaron que este asentamiento iniciado hace cerca de tres décadas al sur poniente de la capital michoacana fue de los primeros en iniciar campañas de vigilancia vecinal ante la inseguridad, y pese a que éstas han dado resultados, la inseguridad prevalece como el problema más preocupante, este fraccionamiento, ubicado en el margen oriente de Calzada La Huerta, frente a las instalaciones de una conocida refresquera, se empezó a construir aproximadamente en 1983, comentó María Bautista.
Encargada del orden suplente y habitante del lugar desde hace 29 años, detalló que se edificó en módulos de cuatro casas, que eran iguales entre sí, y que con el paso del tiempo han sido modificadas, el asentamiento se compone de un total de 19 manzanas, incluso, derivado de estos trabajos, algunos de los vecinos descuidaron el retiro de restos de material de construcción en las calles y al paso del tiempo han producido protuberancias en el pavimento que complican la circulación de los vehículos.
Sin embargo, una de las principales preocupaciones de los habitantes de este asentamiento es la inseguridad, pues pese a que desde hace más de tres años esta colonia inició vigilancia vecinal que ha dado resultado tras a la ola de inseguridad que les aquejaba, los atracos a transeúntes persisten, y aunque son notorios los letreros de “vecino vigilante” que están instalados en la mayoría de las casas de este asentamiento, la vecina del lugar y suplente de la encargada del Orden señaló que los asaltos a mano armada, principalmente a menores estudiantes, aquejan aún a los habitantes de Los Pinos.
