Habitantes de las comunidades del noreste del territorio municipal coahuayanense, integrantes del colectivo ambientalista Guardianes de la Selva, se acercaron a la corresponsalía en la Costa-Sierra Nahua para hacer pública su preocupación por escases de lluvias que en la actual temporada se está presentando en el municipio.
Al respecto los ambientalistas dijeron contar con estadísticas referentes a la cantidad de lluvia que ha caído en el municipio de Coahuayana desde el 1 de enero de 2011, resultando que estos datos señalan claramente una disminución significativa en la cantidad de lluvia que hemos tenido en lo que va del presente año con respecto al mismo período del año pasado.
“Son los niños de Santa María los que están trabajando en recolectar esta información, ellos toman los datos y luego los procesan en la computadora y así es como nosotros nos vamos aprendiendo entender estas cosas como lo son las lluvias”.
“Según esos datos, al 18 de septiembre del año 2011 en Coahuayana habían caído un promedio de 1 179.53 milímetros de lluvia, en tanto que al 18 de septiembre de este 2012 apenas han caído 747.47 milímetros; esto significa una disminución del 36.62%.”
“Nosotros, como campesinos sabemos que difícilmente esta situación se va a componer; ya septiembre casi se acaba y en octubre ya no llueve gran cosa. Posiblemente en diciembre o enero podamos tener algunas lluvias pero también sabemos que esa agua causa también muchos perjuicios a las siembras de riego; sobre todo a las hortalizas, y a los árboles frutales les tumba la flor, como nos pasó por ejemplo este año que nos llovió fuera de tiempo.”
Con estos argumentos los Guardianes están pidiendo a las autoridades de todos los niveles de gobierno que no echen en saco roto esta información y que con tiempo se puedan planear y ejecutar políticas efectivas de apoyo a la población ante la nueva crisis que se avecina; la crisis del agua.
Pero sobre todo el llamado es a la población en general a hacer conciencia sobre lo urgente que resulta atender los graves problemas ambientales desde una perspectiva de las propias comunidades y no esperar a que todo lo vengan a resolver los gobiernos, pues según señalaron, “el problema es de todos, la solución debe venir también de todos”.
“La situación es sencilla, no requiere de mucha explicación científica: hemos destruido más de la mitad de las selvas de Coahuayana, y sin árboles no hay lluvia, sin lluvia no se puede cultivar la tierra y sin no cultivamos la tierra todos vamos a padecer hambre, o tendremos que comprar el maíz, la maseca y el frijol a otros estados o países; al precio que nos quieran vender, si es que nos quieren vender, porque recordemos que el problema del agua no es solo de los coahuayanenses, es un problema mundial.”
