Deportes – Grupo Diario de Morelia
De poca utilidad para ambos equipos, el empate entre Puebla y Monterrey reflejó las debilidades de ambos: mientras los Camoteros quisieron pero no pudieron, los regiomontanos dieron la impresión de quedarse nuevamente por debajo de su potencial.
A pesar de que iniciaron ganando, los Rayados nunca brillaron por su afán ofensivo y más bien merecieron un nuevo signo de interrogación por la manera como permitieron que fuera el local quien propusiera durante casi los 90 minutos.
Con la fortuna a favor, el cuadro de José Guadalupe Cruz se vio arriba apenas al minuto 3, gracias a un resbalón de Jesús Chávez, quien así perdió el balón ante Wilson Morelo para que luego Marlon de Jesús definiera ante la salida de Jorge Villalpando.
Como para confirmar que ese tanto no era producto de la inercia sino más bien de un accidente, el Puebla estuvo a punto de empatar en la siguiente jugada, con un machucón de Iván Bella en el área chica que en la línea despejó Severo Meza.
Calculador, el Monterrey intentó y estuvo cerca aunque nunca con el desparpajo de unos imprecisos Camoteros, que aún así poco después tuvieron un remate de Bella al travesaño.
Gracias a ese afán, finalmente los de La Franja se encontraron con el empate al 38’, y de gran manera porque nuevamente Matías Alustiza firmó un golazo.
El argentino cabeceó de espaldas al arco un centro desde media cancha de Michael Orozco, para techar al portero visitante y festejar con la misma euforia que hace una semana, cuando igual un “globo” suyo le valió al Puebla para rescatar la igualada ante Pumas.
Con el empate sin goles frente a Cruz Azul la semana anterior en el Tec, el Monterrey ahora quiso ser distinto en el segundo tiempo, cuando el “Profe” rediseñó el frente a partir de las salidas de Omar Arellano, Morelo y De Jesús, pero con los ingresos del “Chelito” Delgado, Lucas Silva y Othoniel Arce.
De regreso en la institución, fue este último quien intentó revolucionar el juego de su equipo y reflejo de ello fue el zurdazo que al 64’ le tapó Villalpando, quien poco después también la hizo de héroe, al desviar con la mano un disparo potentísimo de Darvin Chávez, por el cual incluso se dolió del hombro.
Con el tiempo encima, el Monterrey quiso equilibrar e incluso cerca del final Neri Cardozo estrelló en el travesaño un cobro de tiro libre.
Sin embargo, a Rayados no le alcanzó el tiempo para revertir, ni al Puebla le fue suficiente la ambición para buscar su primer triunfo del torneo, por lo que ambos se quedaron con 2 puntos en el mismo número de jornadas, una realidad que al menos hoy no pone a ninguno de ellos como candidatos al título.