M. Sánchez Vargas. Que se sienta feo el hecho de que hasta con lo divino se hace negocio, pasa; peor sería no reconocer que hay hambre y además , hay que entender que luego poco a poco se le regresa a la iglesia ese importe por medio de las limosnas porque no exigen, pero sí crean mil pretextos para que uno crea estar comprando un cachito de eternidad, o cuando menos de bien morir.
Bueno y eso no es nada, porque están pidiendo ya 22 mil pesos por disponer de un espacio en la parte superior de los portales desde donde se puede ver la catedral, donde el Santo Papa podrá verse y al través de las bocinas, oírle decir la misa que le va a celebrar a los niños. Por parte de los carentes, recurrirán a la televisión que facilita comodidad y que la efervescencia dela fe puede repercutir en uno, será una satisfacción ya que Dios está en todas partes.
Es el viernes el día en que llega a nuestro país el Papa y teniendo como hábitat la capital del país, de ahí, se desplazará a los lugares que visitará en nuestro territorio patrio y solamente de Ciudad Juárez despegará para regresar al Vaticano, no sin antes bendecir depósitos de aguas, para llevar a las tumbas de tantas mujeres asesinadas.
Asi es de que aquí el 16, día martes tendremos al Papa desde las ocho de la mañana, para despedirle desde el Estadio Morelos donde tomará el helicóptero que lo llevará al aeropuerto para regresar a su centro de operaciones que es la capital de donde partirá a Ciudad Juárez y al terminar sus actividades, vuele al Vaticano.
